A veces veo juguetes muertos
Pianista, que me ve con buenos ojos, ha notado en mí esa elegancia en el vestir y el hablar que sólo tenemos los que hemos vivido en Barcelona. Decidido, al parecer, a que vuelva allí, al lugar al que pertenezco y que nunca debí abandonar, me envía esta interesante oferta de alquiler.
Les cuelgo unas fotos para que vayan abriendo boca.
Además me insiste en que les linke esto, por no sé qué de la SGAE, la policía, su identidad y rollos.
Que les guste, majos.